I CONCURSO DE MICRORRELATOS NAVIDEÑOS 2020: RELATOS PREMIADOS
MI PROPÓSITO DE ESTE AÑO: CREER
Me despierto en la noche, todo está oscuro, tan solo el sonido de mis padres discutiendo otra vez acompaña el momento, depresión. Levanto la mirada hacia el cielo a través de mi ventana y observo una estrella más grande y brillante de lo normal, curiosidad.
Por la mañana, me dirijo sin esperanza alguna al salón para mirar bajo el árbol de Navidad, ¡qué ilusa! Para mi sorpresa, había una carta para mí en forma de estrella, – ¡Feliz Navidad! ¡Ho!¡Ho!¡Ho! – ponía, esperanzada. Miré hacia arriba con la carta en el pecho y sonreí.
Zaira Baeza Romero, 2.º ESO B
¿SANTA…?
Acabó su trabajo y volvió a su casa. Iba cubierto con una gabardina, ya que su vestimenta de trabajo era algo llamativa. Al llegar, se quitó la gabardina y también el traje. Lo llevó a la bañera y sacó los productos químicos. Debía eliminar las manchas de sangre, aunque no era muy complicado. Su traje rojo podía disimularlas bien. Ya había comenzado la época navideña y él la adoraba, era cuando Santa Claus podía regresar de su descanso. Curiosamente, la ciudad estaba aterrorizada por su aparición. ¿Quizás sería porque lo que él traía no eran precisamente felicidad y regalos?
Éric Piqueras Herrero, 4.º ESO A
LA ESPERA DE LA FELICIDAD
Entré al comedor y no lo vi; no vi su gorra roja ni tampoco su trineo luminoso. Mis padres siempre decían lo mismo, “ya lo verás el próximo año”, pero nunca lo vi. En el fondo me pregunto: ¿qué es lo que me esperaba encontrar? ¿Magia? ¿Felicidad? ¿Ilusión? Puede ser que todas ellas juntas. Pensaba que lo superaría, pero cuanto más crecía, más lo esperaba; no su persona, sino lo que representaba y la fuerza que me daría para seguir adelante en el día a día. Veinte años después, me doy cuenta de que siempre estuvo ahí. El amor familiar.
Héctor Aniorte López, 1.º Bach. A
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