Las técnicas de dramatización son una buena herramienta para facilitar el trabajo en grupo y la participación en el aula, favoreciendo la interacción y el conocimiento de los compañeros y compañeras que han de realizar proyectos conjuntos. Con esta finalidad las utilizo en mi clase de Música de 4º de ESO en la que, al tratarse de una asignatura optativa, el alumnado procede de distintos grupos. En esta ocasión utilizaré el teatro de objetos, una de las técnicas aprendidas en el Curso «Drama techniques for the classroom» realizado en Dublin en julio.
He propuesto al alumnado la realización de diferentes actividades con los objetos que he traído: escenificar ante el resto de la clase la publicidad de un objeto al que habrán dado una utilidad que nada tiene que ver con lo que es en realidad: una flor como plumero, una caja de cerillas como cartera…etc. Otra de las actividades propuesta es seleccionar varios objetos e inventar una teoría sobre sus posibles usos, teniendo en cuenta que las personas del grupo son científicos procedentes de otro planeta que han encontrado dichos objetos en la exploración de un planeta abandonado.
El hecho de plantear actividades que no tienen relación con el contenido académico de la materia hace que la creatividad irrumpa en escena y que el miedo a equivocarnos disminuya. El alumnado de estas edades es reticente a hacer actividades que se salen de los establecido, pero impulsar propuestas que les hagan abandonar su zona de confort da buenos resultados y les hace mejorar sus habilidades.